Dentro de un hospital inteligente o automatizado existen entornos de sanación donde la creciente digitalización del edificio significa que la tecnología está funcionando a la perfección para brindar beneficios a las personas que se conectan a ella, la atención se centra en los sistemas digitales y el potencial que ofrecen al edificio, de esta manera los administradores del hospital pueden comprender mejor las necesidades tanto de los pacientes como del personal para crear una experiencia más fluida y mejores estándares de atención.

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El objetivo de automatizar un hospital se centra en mejorar la resiliencia, fortalecer los aspectos estructurales y operativos y proporcionar tecnologías ecológicas; las mejoras energéticas incluyen instalaciones de paneles solares, baterías de almacenamiento eléctrico y sistemas eléctricos de bajo consumo, que además de reducir el consumo de energía, reducen la huella de carbono del sector de la salud en el medio ambiente y proporcionan al hospital autonomía energética, lo que le permite continuar funcionando durante emergencias y desastres. Las nuevas tendencias y oportunidades de mercado exigen una infraestructura de red diferenciada, en donde los hospitales modernos están construidos sobre un entorno TIC, herramientas interconectadas, y nuevas funcionalidades para facilitar el trabajo de los médicos, reducir costos sanitarios y mejorar la experiencia del paciente.

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Los hospitales sienten la necesidad de evolucionar junto con las nuevas tecnologías, que permiten a su vez comodidad, rapidez, ahorro en costos e incluso perfección. De igual forma estas tecnologías permiten a los pacientes el control de la temperatura, ventilación y otras funciones en sus habitaciones para mejorar su confort, las aplicaciones de control de la habitación se visualizan de forma sencilla en el smartphone o tablet del paciente; las nuevas tecnologías de iluminación también ayudan en el proceso de recuperación.